Secretaría de Carteles: ¿Cuál es el aporte distintivo que podría tener el cartel en la investigación y formación en el ámbito del centro?¿Puede ser el cartel un modo de tratamiento del malestar institucional?

Eugenia Serrano: Intentaré responder a los interrogantes planteados a partir de un breve ejemplo.

El equipo directivo de una institución que ofrece talleres a jóvenes y adultos con diferentes tipos de discapacidades secundarias a compromisos orgánicos severos decide recibir a un joven loco que pone todo patas para arriba. El orden, las rutinas, las reglas instituidas, las certezas sostenidas, la quietud, todo es puesto en cuestión por el encuentro con la locura que rechaza toda oferta estandarizada.

La transferencia de la dirección de la institución con el psicoanálisis de la orientación lacaniana y la conmoción generalizada empujan a una supervisión que por primera vez incluye a todos: talleristas, acompañantes, psicólogos, etc. La pregunta clínica por el consentimiento que queda fructíferamente abierta despierta en algunos el interés por la lectura. El dispositivo de cartel es ofrecido como alternativa para sostener lo que aguijonea y despierta. Para algunos será una primera experiencia.

¿Cuál fue el circuito?

En el comienzo se localiza la causa de unos pocos de alojar un trozo de real ingobernable que desafía desde el minuto cero las intenciones de inclusión de la institución. El efecto es el desconcierto y la angustia. Es en esta coyuntura que la transferencia indica un posible tratamiento al malestar: el control, pero esta vez con una torsión, incluye a todos y no solo a aquellos que ya se orientan por el psicoanálisis.

Es en ese espacio que una pregunta no termina de responderse, ¿cómo hacer que un sujeto que rechaza radicalmente el lazo con el otro consienta a algún tipo de encuentro? Eso -que tiene en su centro lo singular de cada vez- empuja, provoca, precipita hacia la "elaboración sostenida en un pequeño grupo"[1] conformado por quienes se muestran concernidos.

Sabemos con Freud que el obstáculo no solo puede volverse fecundo si no que la formación del analista y también el destino de cada análisis dependen de eso. Sin embargo, ¿cómo provocar esta transformación? El ejemplo aquí presentado demuestra cómo el cartel puede constituirse como un lugar propicio para que ese acontecimiento se produzca.